De todo y de nada.

Hoy tengo el típico día que te levantas de lujo y tardan nada en venir a joderlo, entre mis padres, mi hermano y mi mejor amiga me han cagado el día. Estoy de mala leche, con ganas de llorar y por si faltaba algo, resfriada.

Ayer quería escribir alguna entrada pero me dormí pronto, tengo ganas de que sea el sábado para salir, tenemos un planazo pero con mi resfriado…poco se puede hacer, espero que se me quite, para una vez que tengo planes!!!

Ya se acerca la navidad, la odio, no sé muy bien porque la verdad, cuando era pequeña me encantaba, los regalos, estar con la familia, no sé el ambiente que se respira pero hoy por hoy la odio es de las pocas cosas que he aprendido de mi hermano, me parece una época muy ‘falsa’ por llamarlo de alguna forma, nos hinchamos a comer mientras hay muchísima gente que no tiene nada para llevarse a la boca y ahora con la crisis que hay cada vez habrá más gente así, nos hacemos regalos, pero, porque? Yo prefiero que me regalen algo otro día del año que no lo espere, un regalo debe ser una sorpresa, por eso nunca pido nada para reyes, siempre terminan comprándome algo pero nunca pido nada.

Quizás otro de los motivos por los que no me gusta es porque no tengo pareja, puede sonar a tontería, en el fondo lo es, pero es una cosa que me molesta mucho, todos los años cuando se termina pienso ‘venga a ver si el año que viene tengo pareja’ y cuando llega el año siguiente mi vida sigue exactamente igual, y me molesta, me molesta porque quiero que cambien ciertas cosas, no solo a nivel amoroso y no tengo el suficiente valor para cambiarlo, me da miedo las consecuencias que eso puede tener, dicen que es mejor malo conocido que bueno por conocer y en mi caso es así, pero estoy deseando que un día me levante y mi ‘yo’ que no me gusta haya desaparecido, ser otra persona totalmente nueva, dejar atrás los miedos, las inseguridades y ser yo al cien por cien.

Hoy me siento sola y además, estoy escribiendo una entrada de mierda pero me sirve para desahogarme, en fin, creo que voy a ir a ponerme el pijama y a acostarme o ver alguna serie/película y hincharme a llorar.